El significado tradicional de este arcano está referido a la infancia, los niños, los hermanos, la amistad, la solidaridad, la alegría, la necesidad de ser uno mismo, la conciencia.
Este arcano presenta similitudes con El Diablo (XV). Podría decirse que este ha encendido su antorcha en el fuego de El Sol, que la energía que se hallaba en la oscuridad del arcano XV ha salido ahora a plena luz y que los dos personajes, antes diablillos encadenados, tienen una relación de ayuda mutua, de amor humano en estado puro.
En numerología, El Sol (XVIIII) guarda relación con El Ermitaño (VIIII). El 9 es un movimiento de superación de lo perfecto que supone la entrada en crisis para la construcción de un mundo nuevo. Si el ermitaño lleva con su linterna una luz, sabiduría, una experiencia, ha decidido apartarse del mundo y transmite su tesoro a algunos elegidos. El Sol, por el contrario, trabaja en la prodigalidad y ofrece su luz y su conocimiento. Acepta a todos los seres y sobrepasa la individualidad creando la colectividad. Sin El Sol, El Ermitaño cae en las profundidades de la soledad y la avaricia espiritual. Si El Ermitaño es experiencia, El Sol es renovación.
Gracias a El Sol, el iniciado consigue llegar más allá de los límites del inconsciente para lograr un acercamiento al centro místico bajo la luz protectora del sol de la consciencia. Así, supera sus miedos y sus dudas y aprende a mantener encendido el fuego de su espíritu que le permite discernir el verdadero sentido de las cosas.
Simbología de El Sol:
Este arcano presenta similitudes con El Diablo (XV). Podría decirse que este ha encendido su antorcha en el fuego de El Sol, que la energía que se hallaba en la oscuridad del arcano XV ha salido ahora a plena luz y que los dos personajes, antes diablillos encadenados, tienen una relación de ayuda mutua, de amor humano en estado puro.
En numerología, El Sol (XVIIII) guarda relación con El Ermitaño (VIIII). El 9 es un movimiento de superación de lo perfecto que supone la entrada en crisis para la construcción de un mundo nuevo. Si el ermitaño lleva con su linterna una luz, sabiduría, una experiencia, ha decidido apartarse del mundo y transmite su tesoro a algunos elegidos. El Sol, por el contrario, trabaja en la prodigalidad y ofrece su luz y su conocimiento. Acepta a todos los seres y sobrepasa la individualidad creando la colectividad. Sin El Sol, El Ermitaño cae en las profundidades de la soledad y la avaricia espiritual. Si El Ermitaño es experiencia, El Sol es renovación.
Gracias a El Sol, el iniciado consigue llegar más allá de los límites del inconsciente para lograr un acercamiento al centro místico bajo la luz protectora del sol de la consciencia. Así, supera sus miedos y sus dudas y aprende a mantener encendido el fuego de su espíritu que le permite discernir el verdadero sentido de las cosas.
Simbología de El Sol:
- El Sol: es la manifestación del espíritu en toda su gloria, que envía sus benéficos rayos.
- Las gotas de rocío: simbolizan la bendición que otorga el astro rey al iniciado y que vivifican su alma.
- Los niños gemelos: representan la inocencia y la espontaneidad. También hace referencia a los aspectos humanos y divinos si tomamos como referencia el mito de Cástor y Pólux (Géminis), en el que el primero era mortal y el segundo divino.
- El muro: es un escudo protector que permite madurar a los niños en un entorno seguro. También puede simbolizar una construcción hecha gracias a la cooperación de los gemelos.
- El río: nuestras dificultades en movimiento continuo, que superamos por la influencia del astro rey.
- Inteligencia positiva, que construye situaciones felices y aporta la capacidad necesaria para la realización de grandes empresas. Es la persona extrovertida, noble y capaz de disfrutar plenamente de la alegría de vivir, a menudo dotada de talento artístico. El Sol concede la paz, la libertad, el amor correspondido, el éxito, los honores y las recompensas justas. Sus cualidades son el altruismo, el idealismo, la extroversión, la filantropía, la belleza y el buen humor. Representa la obra completa, la solución a cualquier problema, la vitalidad y la buena salud. Amor recíproco, fraternidad, nueva vida, asociación, cosecha abundante, verano, luz irradiación, infancia, cortar con el pasado para ir más lejos son algunos significados importantes de esta carta.
- En sentido negativo habla de retrasos en situaciones que se daban por hechas, emprender proyectos por encima de las posibilidades del sujeto, vanidad, egoísmo, orgullo, frustración en la pareja, guardar las apariencias tras el prestigio, artista incomprendido.
- En la salud, rige las enfermedades propias de la infancia e indica buena salud y ganas de vivir.
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